Autor: Carlos Calderon
Cuando las enfermedades dañan las articulaciones, estas pueden negarse a moverse, siendo la rigidez un resultado del daño crónico de las articulaciones. Las enfermedades como la artritis, la osteoartritis y algunas otras, pueden ocasionar que estos miembros dejen de moverse como lo hacían antes, por lo que se amerita una artroplastia.
La artroplastia es la operación quirúrgica mediante la cual se busca regresar la movilidad a diversos miembros y articulaciones del cuerpo mediante la aplicación de un elemento que ayude a recuperar movilidad: una prótesis.
Durante esta operación lo que se hace es tomar la articulación dañada, que ya no se mueve y genera dolor en el paciente, y removerla del cuerpo para evitar que se siga dañando. Al remover la articulación del cuerpo el siguiente paso es tomar una articulación artificial y colocarla en el lugar de la que ha sido removida.
Estas articulaciones artificiales son generalmente fabricadas de cobre, de titanio, de cromo y también plásticos, polietilenos de alta densidad. En estos tiempos se han hecho avances al llevar a cabo articulaciones hechas en impresoras 3D que emulan las articulaciones corporales de una forma increíble.
Los tipos de artroplastia
Esta cirugía cuenta con diversos tipos de la misma, mediante los cuales se puede mantener un control en la articulación, y generarse prótesis de un excelente funcionamiento. Las más comunes que se conocen en estos tiempos son:
La artroplastia de cadera
Es una cirugía mediante la cual se remueven y se cambian las articulaciones de la cadera. Esta cirugía de artroplastia está diseñada para ser usada de tres maneras, que comprenden la cirugía de cadera cementada, no cementada y la híbrida.
En el caso de la cementada, la prótesis requiere de un cemento quirúrgico para que este puede aferrarse al hueso; está pensada para pacientes con edad avanzada y que han tenido problemas de fracturas por osteoporosis o artritis.
La no cementada se aferra directamente al hueso, y está pensada para personas mayores con buena densidad ósea que puedan soportar sin mucho problema el material en sus huesos, mientras que la híbrida mezcla ambos conceptos, teniendo una de las partes de la articulación cemento quirúrgico mientras que la otra se adhiere al hueso.
Artroplastia de rodilla
En este caso se sustituye la articulación de la rodilla, ya sea total o parcialmente, y se cambia por una prótesis que pueda llevar a cabo los movimientos de manera más eficaz que la articulación dañada.
Artroplastia de hombro
Aquí se sustituye la articulación del hombro debido a problemas como artritis, fracturas complejas o procesos tumorales. No es muy difícil de llevar a cabo y el paciente presenta una recuperación casi total en poco tiempo.
Artroplastia de codo
Se reemplazan los huesos de la articulación por piezas artificiales. Esta en particular cuenta con dos partes cementadas tanto en el cúbito como en el húmero, y se conectan con una bisagra que permite el movimiento.
Artroplastia tobillo
Para esta se remueven la tibia y el peroné del astrágalo y se retiran las partes dañadas de los huesos para finalmente colocar la pieza artificial.
Sobre Carlos Calderon

Criado en un pueblo a las afueras de Madrid, soy médico de familia por vocación.
Empecé este blog para documentar mis estudios de Salud Pública pero pronto, se convirtió en un referente del sector.
Recuerda consultar a tu médico. La información de este blog es meramente documental y nunca te lo tienes que tomar como datos verídicos. Siempre consulta a tu médico de cabecera antes de llegar a conclusiones con estos datos.