Autor: Carlos Calderon
Un cistoadenocarcinoma es un tipo de tumor epitelial caracterizado por el crecimiento invasivo masas quísticas revestidas con epitelio; a menudo dispuestas en un patrón de crecimiento descontrolado.
La edad de los pacientes con este problema tiene una prevalencia máxima en la sexta década de vida. Este tumor se presenta típicamente como una masa asintomática, que aumenta gradualmente. A veces, con ulceración de la superficie.
La extirpación quirúrgica de dicho tumor es apropiada para casos de grado bajo e intermedio. Para tumores de grado alto y avanzado, se debe agregar radioterapia adyuvante.
Tipos
En primer lugar, tenemos el cistoadenocarcinoma de ovario. Este es un tipo de quiste que generalmente afecta a mujeres de mediana edad en edades comprendidas entre los 25 a los 45 años de edad. Los casos de este tipo no son muy comunes porque los tumores de los ovarios pueden ser benignos, limítrofes o de bajo potencial maligno o tumores malignos. Por lo tanto, no todos los tumores de ovario son cánceres.
Por su parte el cistoadenoma seroso se presenta como una masa sólida o quística única dentro de un ovario. Mientras que el cistoadenoma mucinoso se presenta como una masa sólida o quística única alrededor de un ovario. Este último es un tumor de ovario maligno que en raras ocasiones, puede ocurrir como múltiples masas o quistes dentro de un solo ovario, o puede afectar ambos ovarios también.
Es importante mencionar que este tipo de tumor ovárico tiene una tasa de recurrencia moderadamente alta, incluso después de su extirpación quirúrgica.
Síntomas de este tipo de tumor
Generalmente; un cistoadenocarcinoma se presenta con signos y síntomas que varían en cada caso. El síntoma más común es sentir dolor abdominal acompañado de pérdida de peso con aumento de la circunferencia abdominal.
No obstante, los pacientes deciden visitar al médico cuando comienza el sangrado vaginal. Otros síntomas son el cambio en el apetito, náuseas y cambios en el funcionamiento de los intestinos. Las complicaciones debidas a estos tumores ováricos incluyen metástasis a órganos locales y distantes.
Síntomas de este tipo de tumor
El diagnostico de un cistoadenocarcinoma seroso de ovario al igual que el cistoadenoma mucinoso se realiza con una serie diferente de exámenes que incluyen una evaluación física, pruebas de sangre con conteo sanguíneo completo de los glóbulos blancos, examen pélvico y otros más.
Entre todos los exámenes el más importante es una biopsia de tejido y se envía a un laboratorio para un examen patológico para descartar la presencia de la cistoadenocarcinoma.
Los diversos tratamientos
Los tratamientos suelen ser una combinación de quimioterapia y radioterapia dando como resultado a últimas instancias la cirugía. Los pronósticos son más positivos cuando es detectado a tiempo y empezando un tratamiento rápidamente. Se recomienda visitar regularmente al ginecólogo para practicar examines poco invasivos como las ecografías para revisar el estado en que se encuentra el sistema reproductor en general.
Se debe estar al pendiente cuando se tengan los siguientes factores de riesgo: empezar la etapa reproductiva después de los 30 años de edad, sobrepeso y las mujeres con mutaciones genéticas en los genes KRAS, BRCA-1 y BRCA-2 tienen un mayor riesgo. También se tiene más de un 70 por ciento de riesgo cuando existe antecedente familiar cercano.
Sobre Carlos Calderon

Criado en un pueblo a las afueras de Madrid, soy médico de familia por vocación.
Empecé este blog para documentar mis estudios de Salud Pública pero pronto, se convirtió en un referente del sector.
Recuerda consultar a tu médico. La información de este blog es meramente documental y nunca te lo tienes que tomar como datos verídicos. Siempre consulta a tu médico de cabecera antes de llegar a conclusiones con estos datos.