Autor: Carlos Calderon
Las enfermedades mentales son hoy en día más conocidas de los que eran antes. Anteriormente los tratamientos para estas afecciones y trastornos eran nulos o ni siquiera existían. Los pacientes de enfermedades mentales como la bipolaridad, la esquizofrenia y la depresión eran tenidos como locos y encerrados en manicomios o asilos por el resto de sus vidas.
Hoy en día dichas prácticas no solo están mal vistas, sino que son además obsoletas. Cada vez se concientiza a un mayor número de personas sobre estos trastornos.
No obstante, la barrera de la ignorancia está aún lejos de ser derribada por completo, y todavía hay sectores de la población que ejercen una perenne discriminación hacia las personas que padecen de patologías de orden mental. Se sabe que hay personas que evitan darles trabajo o tenerles cerca por una desinformación que se busca ayudar a erradicar. Es por ello que en este post conocerás más sobre la estigmatización de enfermedades mentales.
Enfermedades mentales
Los trastornos mentales son condiciones médicas que surgen en el cerebro por acción de una anomalía bioquímica en el mismo. Los pacientes de estas enfermedades cuentan con síntomas diversos dependiendo de las patologías que se puedan ver en ellos.
En estos trastornos la genética juega un papel más bien pequeño ya que se han visto casos de pacientes que en una familia sin antecedentes de trastornos mentales presentan uno de lo más severo, como pueden ser la esquizofrenia o el trastorno bipolar o el síndrome de Down; asimismo se han dado casos que en familias con antecedentes los descendientes no cuentan con estas patologías.
Sin embargo estos trastornos son difíciles de tratar y han tenido graves consecuencias para las personas que los padecen, puesto que si bien en muchos casos los pacientes son aceptados y pueden integrarse a la sociedad y al mundo laboral, otros no corren la misma suerte y son estigmatizados por padecer de estas enfermedades.
Estigma enfermedad mental
Se sabe bien que en los casos de discriminación lo que se consigue es minimizar a una persona como individuo al posicionarlo dentro de un grupo. El uso más conocido es el de la xenofobia, que por citar un ejemplo minimiza la capacidad como individuo de una persona al colocarlo dentro de un grupo conformado por los representantes de su propia etnia, e impidiendo que puedan tener acceso a las cosas que otros tienen por simple derecho de nacimiento.
En el caso de los enfermos mentales se consigue, por la ignorancia, posicionarlos en un grupo en el que se cree que solo son personas violentas, sin capacidad para trabajar en un ambiente estructurado y sin capacidades mínimas para subsistir. Es cierto que en algunos casos la enfermedad avanza de manera que un paciente pueda ver mermadas sus capacidades, pero en la mayoría de los pacientes con los tratamientos actuales se presenta una relativa normalidad y una gran capacidad.
Lo bueno que puede surgir de todo esto es que gracias precisamente a la estigmatización y a la ignorancia se han comenzado a implementar soluciones que permitirán que muy pronto los pacientes de enfermedades mentales no sean estigmatizados. Se sabe de instituciones que buscan concientizar por medio de charlas, visitas y programas de ayuda que han sido de mucha utilidad para los pacientes, retornándolos a la sociedad y a la vida laboral y permitiendo que nuevamente se sientan como personas valiosas.
Sobre Carlos Calderon

Criado en un pueblo a las afueras de Madrid, soy médico de familia por vocación.
Empecé este blog para documentar mis estudios de Salud Pública pero pronto, se convirtió en un referente del sector.
Recuerda consultar a tu médico. La información de este blog es meramente documental y nunca te lo tienes que tomar como datos verídicos. Siempre consulta a tu médico de cabecera antes de llegar a conclusiones con estos datos.