Autor: Carlos Calderon
La psoriasis es una alteración genética que causa mucha inflamación en la piel y afecta a su vez, las articulaciones, dejando marcas enrojecidas y descamadas acompañadas de dolor. Un poco más del 2 por ciento de la población contrae esta enfermedad que no es contagiosa, pues los hallazgos científicos revelan que se desarrolla por una serie de factores hereditarios.
De tal manera que sí, la psoriasis se hereda y puede aparecer en la infancia, en la adolescencia y en la etapa adulta. El sistema inmunológico es el que activa esta patología, específicamente en los linfocitos T, células que se disparan de manera errónea y causan otras reacciones celulares que conllevan a la dilatación de los vasos sanguíneos.
Las lesiones cutáneas se dan de manera repentina y se agravan lentamente, se curan y aparecen de nuevo. El tamaño de las placas es variable y se sitúa por lo general en las rodillas, en los codos, en la espalda, en el cuero cabelludo y en los glúteos. También hay otras áreas que pueden verse afectadas como las axilas, la ingle, el ombligo o las cejas. Los síntomas van acompañados de dolor, lesiones genitales, alteración en la forma y color de las uñas, caspa y picazón.
Prevalencia
La psoriasis es hereditaria. De hecho, si alguno de los padres la tiene, uno de los hijos tiene probabilidades de desarrollarla más adelante, aunque esto también depende de las condiciones ambientales, pues al ser una patología genética, es más propensa de activarse o no tras sufrir infecciones crónicas, tener obesidad, someterse a altos niveles de estrés, consumir alcohol, experimentar cambios hormonales, traumatismos o cursar con otras patologías como la artritis reumatoide.
Importantes centros de investigación confirmaron que el factor genético hereditario es determinante. Y es que los genes LCE3B y LCE3C son lo responsables del funcionamiento de la epidermis y cuando están ausentes, elevan el riesgo de una persona a sufrir psoriasis.
Otro descubrimiento arrojó que los gemelos (idénticos) tienen altas probabilidades de desarrollar esta enfermedad. Las evaluaciones clínicas demostraron que a los pacientes con psoriasis les falta dos réplicas de estos dos genes antes mencionados.
La psoriasis es una enfermedad hereditaria porque los genes vinculados con la regulación cutánea pertenecen a un núcleo del cromosoma humano encargado de la diferenciación epidérmica a través de un complejo génico. El desequilibrio en las proteínas de la piel altera el crecimiento de este órgano. Por estas razones es que en la consulta lo primero que se les pregunta a los pacientes es si tiene familiares con antecedentes de psoriasis.
De la totalidad de los casos, únicamente un tercio tiene un familiar de primer grado con psoriasis. Cuando ambos padres tienen la enfermedad, el hijo tiene posibilidad desarrollarla en un 40 por ciento, pero en este proceso intervienen los genes dominantes (impronta genética).
Sobre Carlos Calderon

Criado en un pueblo a las afueras de Madrid, soy médico de familia por vocación.
Empecé este blog para documentar mis estudios de Salud Pública pero pronto, se convirtió en un referente del sector.
Recuerda consultar a tu médico. La información de este blog es meramente documental y nunca te lo tienes que tomar como datos verídicos. Siempre consulta a tu médico de cabecera antes de llegar a conclusiones con estos datos.