Autor: Carlos Calderon
La psoriasis es una patología que afecta la calidad de vida de muchas personas, pues genera ciertas molestias que las incapacita para concentrarse en sus actividades cotidianas. Sus síntomas se derivan de la aparición de placas redondas en la piel, con enrojecimiento que causa mucha picazón y que progresivamente se van extendiendo y descamando hacia las manos, brazos, codos, rodillas, en las articulaciones y en otras áreas que varían en cada paciente.
El cuadro se agrava con la aparición de pústulas y otras lesiones en la piel que si no son tratadas a tiempo se complican cuando cursan con otras enfermedades. Uno de los factores de riesgo en la psoriasis son los medicamentos, pues muchos de ellos la empeoran y dificultan el proceso de recuperación. Si el diagnóstico es generalizado, se transforma en eritrodermia.
Los fármacos que pueden desencadenar la psoriasis son los que contienen sales de litio, los antimaláricos, los inhibidores de enzimas de angiotensina, los betabloqueantes y los anti inflamatorios no esteroideos, mientras que los corticosteroides al ser retirados bruscamente del organismo pueden ocasionar efectos secundarios.
Si surge un brote inesperado de psoriasis, lo más recomendable es que consulte a su médico para que evalúe posibles interacciones, tomando en cuenta que si estás bajo un tratamiento sistémico, también es posible que el organismo esté generando una reacción, sobre todo si tomas medicamentos adicionales para tratar otras enfermedades.
Contraindicaciones
Los casos más comunes son los de pacientes que toman fármacos para reducir la presión arterial, aparte del litio como componente para controlar los trastornos psiquiátricos. Si acudes a consulta por psoriasis, coméntale al especialista qué medicamentos estás tomando, a fin de que pueda prescribirte un tratamiento efectivo para combatir la enfermedad, sin interferir con los que has estado tomando de forma regular.
Es importante que te tomes tu tiempo, ya que es posible que debas someterte a una serie de exámenes con el fin de que se pueda evaluar la enfermedad para un mejor diagnóstico y abordaje, donde se tomen en cuenta todos los factores de riesgo.
Los fármacos responsables de ocasionar la psoriasis vinculados con la hipertensión son: Propranolol, Atenolol, Metoprolol y Clonidina. Con respecto a los psicofármacos (litio) se encuentran en Diazepam, Clonazepam, estos pueden ser sustituidos por otros antidepresivos con inhibidores. Los que combaten la malaria y que pueden activar nuevos brotes, en específico son: Cloroquina, Hidroxicloroquina y Mepacrina, aparte de la Quinidina que sirve para prevenir arritmias. Sin embargo, se ha comprobado que la Atovacuona-proguanil y la Mefloquina son toleradas sin ningún problema.
En cuanto a los anti inflamatorios, evita el Ibuprofeno, la Indometacina y el Naproxeno. Así mismo, en los pacientes con hepatitis que desarrollan cuadro de psoriasis, están contraindicados los interferones que frenan la reproducción del virus.
La psoriasis en la piel se mide según la gravedad de las lesiones y el patrón morfológico. Las leves cubren cerca del 2 por ciento de la superficie de la piel, mientras que las graves se extienden en más del 10 por ciento.
Sobre Carlos Calderon

Criado en un pueblo a las afueras de Madrid, soy médico de familia por vocación.
Empecé este blog para documentar mis estudios de Salud Pública pero pronto, se convirtió en un referente del sector.
Recuerda consultar a tu médico. La información de este blog es meramente documental y nunca te lo tienes que tomar como datos verídicos. Siempre consulta a tu médico de cabecera antes de llegar a conclusiones con estos datos.